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Kathoey en Tailandia: el tercer género

Probablemente, los Kathoeys llevan años ocupando un lugar permanente en la cultura tailandesa. Aunque los hombres femeninos en Tailandia llevan tiempo siendo omnipresentes y se encuentran tanto en ciudades grandes como en pueblos, aún tienen que luchar contra la discriminación social a día de hoy.

¿Qué es un Kathoey?

El término kathoey, katoy, o katoey es un préstamo de la palabra khmer usada en tailandés, que denota una categoría específica de gente transgénero. Originalmente, la palabra significa “hermafrodita”, y es común en Tailandia y Laos. La palabra Kathoey no tiene un equivalente exacto en otras lenguas, y no puede traducirse adecuadamente debido al contenido conceptual diferente de términos similares.

Kathoey se refiere a una categoría homogénea y bien definida de identidad sexual y de género, a veces denominada el tercer género. La mayoría de veces, estos son hombres biológicos que se caracterizan con características femeninas o con una identidad de género femenina, y que desean a hombres masculinos. El grado preciso de auto identificación como mujer va desde demostraciones ocasionales de comportamientos típicamente femeninos y el vestir atuendos de mujer, hasta una identificación consistente y completa como mujer, o como mujer de dos tipos. Kathoey entonces engloba numeras identidades diferentes: el espectro va desde la pura identificación como un hombre homosexual con apariencia femenina, hasta medidas de reasignación de género que pueden incluir cirugía, tratamientos hormonales y más. Mientras algunos Kathoey se esfuerzan en conseguir una apariencia lo más femenina posible, otros no ven ninguna contradicción entre su cuerpo masculino y su identidad femenina.

El papel social del Kathoey

En occidente, a los Kathoey y los transexuales se les suele tratar de manera denigrante, estando lejos de ser completamente aceptados. En comparación con las sociedades occidentales, los Kathoey en Tailandia se consideran más aceptados y visibles. La razón para ello yace probablemente en la cultura budista, en particular la doctrina del karma. Gracias a ello, los Kathoey se ganaron su identidad especial por las acciones de reencarnaciones pasadas. Suele asumirse que esto está ligado a un pecado de una vida pasada, por la que deben sufrir las consecuencias en la vida presente y nacer en el cuerpo equivocado. Por esta razón, en la cultura budista se cree que el Kathoey está destinado a vivir de manera diferente y no se le debe culpar por su comportamiento, sino que habría que sentir pena por él.

Como en Tailandia prevalece una sociedad fuertemente patriarcal, el Kathoey sigue sin poder lograr un reconocimiento legal y social completo. Solo desde 2012 han podido introducir en sus documentos un género diferente del que se les asignó al nacer. Anteriormente, no solo se les negaba esa oportunidad, sino que se les descartaba del servicio militar por creer que sufrían psicosis o locura. Como los hombres en Tailandia tienen que presentar un documento del estado de su servicio militar al conseguir un trabajo o para entrar en la universidad, el no tener sus documentos en regla podía tener graves repercusiones para el kathoey y su carrera profesional. Hasta la fecha, la mayoría de kathoey trabajan en la industria del entretenimiento o vendiendo sus cuerpos debido a la dificultad que tienen para buscar trabajo. Incluso hoy en día, se les suele tratar con una actitud peyorativa, se les ridiculiza y discrimina. La tasa de suicidio entre los kathoey es también más alta que entre el resto de población.

El trasfondo histórico del Kathoey

El término Kathoey ya era común antes de mediados del s. XX, durante la época patriarcal tailandesa. Aunque algunos mitos de origen budista mencionan la existencia de tres sexos, a mitades del siglo pasado los Kathoey no se consideraban un tercer sexo completamente válido, sino desviaciones de los géneros masculinos y femenino. Además de desviaciones físicas, también se les atribuían varios trastornos funcionales como la disfunción eréctil y la esterilidad, además de una conducta desviada. Desde los años 50, ha ido creciendo la diferenciación entre los Kathoey y los intersexuales, al igual que la de mujeres y hombres homosexuales, que no se estableció hasta los años 70.

Según evidencias históricas, los kathoey existían en Tailandia antes de la propagación del budismo en el s. XIII. Se da por hecho que en las relaciones homosexuales una persona asume el rol de carácter masculino, y la otra persona el rol femenino. Este concepto de género en sexualidad también existía en la sociedad budista tailandesa, donde había dos categorías de género para hombres: mientras los "Phu-chai" eran hombres heterosexuales, se denominaba "Kathoey" a todos los hombres biológicos que se desviaban de las convenciones societales de unos siglos atrás. A diferencia de las sociedades cristiana y musulmana, a los Kathoey seguramente nunca se les persiguió o ejecutó. Según algunos registros históricos, hace muchos años incluso había monjes cuyo sexo no se correspondía con los géneros habituales, y a los que se podía considerar Kathoey.

Kathoey, ladyboys y femboys: diferencias y similitudes

Ladyboy es la traducción al inglés del término “kathoey”, que es común tanto en muchos países de Asia como en la industria occidental para adultos. “Ladyboy” suele usarse como sinónimo de “kathoey” y se usa para referirse a mujeres transexuales y hombres homosexuales con rasgos femeninos.

Por otro lado, un femboy es biológicamente un hombre, pero se caracteriza por su comportamiento femenino o apariencia femenina. Aunque los femboy tienen rasgos femeninos, pueden ser de cualquier sexualidad.